La historia de Rómulo Baeza, el mayordomo de la serie ‘La Promesa‘ encierra muchos secretos y eslabones oscuros que, tras ser

meticulosamente recopilados, nos ofrecen un panorama completo de este personaje tan enigmático, explica JdCienfuegos. Desde sus

inicios en una hacienda llamada La Tabanca hasta su rol c

Rómulo Baeza nació en torno a 1850 y, aunque se desconocen detalles específicos sobre su infancia y familia, se sabe que recibió una educación destacada para su época. Esto se debe posiblemente a la ley Moyano, la cual, a mediados del siglo XIX, estableció la enseñanza primaria gratuita y obligatoria en España. A pesar de su origen humilde, Rómulo mostró inteligencia y capacitación, llegando incluso a aprender latín, lo cual sugiere que pudo haber recibido educación en un seminario o una institución similar en el universo de ‘La Promesa’.

El primer empleo conocido de Rómulo fue en la hacienda La Tabanca, donde sobresalió hasta convertirse en capataz. Durante su tiempo allí, ocurrió una tragedia que marcó su vida y la de la familia Castillo. Mateo Castillo, un joven trabajador de la hacienda, sufrió un accidente que lo dejó lisiado y, eventualmente, lo llevó al suicidio. Este incidente, directamente relacionado con una orden de Rómulo, dejó a Gregorio Castillo huérfano y deseoso de venganza. Esta parte de la vida de Rómulo demuestra cómo, desde temprano, su carácter y decisiones afectaron gravemente la vida de terceros.

Después de La Tabanca, Rómulo se empleó en casas de mayor renombre, donde conoció a figuras importantes como Ricardo Pellicer y su familia. Eventualmente, fue contratado por el Barón de Linaje como mayordomo del Palacio de Cádiz. Allí, Rómulo interactuó con varios personajes centrales de ‘La Promesa’ incluyendo a Cruz y Petra, estableciendo relaciones que influirían en eventos futuros. Su disposición para realizar ‘trabajos sucios’ para el Barón y luego para Cruz, muestra su complejidad moral y su lealtad fluctuante.

Rómulo guardaba secretos muy graves, como su implicación en la muerte de Dolores y en actos criminales por encargo de Cruz en ‘La Promesa’. Aunque estos actos están teñidos de lealtad hacia quienes le empleaban, también muestran un lado oscuro de su carácter. Un giro notable en su historia es su decisión de perdonar la vida de Leocadia de Figueroa, demostrando así un atisbo de redención.

lealtades divididas.

Este personaje, magistralmente interpretado por Joaquín Climent, oculta tras de sí un pasado problemático y secretos que podrían cambiar el rumbo de ‘La Promesa’. A continuación, se desglosa su trayectoria desde sus orígenes hasta su posición actual en la trama.