Doña Clara le ha contado a Marta y a Andrés que está pensando en invertir en un nuevo proyecto inmobiliario y que ellos podrían hacer los mismo porque cree que va a ser un gran negocio.

Marta tiene dudas y se lo cuenta a Fina que se muestra muy interesada en ese proyecto. A la joven le encantaría tener una casita propia y empieza a pensar en invertir el dinero que le dejó su padre en eso.

 

 

 

Fina le pide a Marta que la lleve a ver sus terrenos y se van juntas en el coche. Al llegar, Fina saca la cámara de Isidro. Se ha llevado la cámara de fotos de su padre para hacer fotos a los terrenos, pero aprovecha el momento para hacerle fotos también a Marta.

“Eres mi musa”, le dice Fina a una Marta a la que le da vergüenza que le hagan fotos.

Doña Clara le ha contado a Marta y a Andrés que está pensando en invertir en un nuevo proyecto inmobiliario y que ellos podrían hacer los mismo porque cree que va a ser un gran negocio.

Marta tiene dudas y se lo cuenta a Fina que se muestra muy interesada en ese proyecto. A la joven le encantaría tener una casita propia y empieza a pensar en invertir el dinero que le dejó su padre en eso.

Fina le pide a Marta que la lleve a ver sus terrenos y se van juntas en el coche. Al llegar, Fina saca la cámara de Isidro. Se ha llevado la cámara de fotos de su padre para hacer fotos a los terrenos, pero aprovecha el momento para hacerle fotos también a Marta.

“Eres mi musa”, le dice Fina a una Marta a la que le da vergüenza que le hagan fotos.

Mientras discuten quien irá a revelar las fotos, entre risas, descubren que en esos terrenos no hay nada. ¿Habrá sido doña Clara, víctima de una estafa?

Doña Clara le ha contado a Marta y a Andrés que está pensando en invertir en un nuevo proyecto inmobiliario y que ellos podrían hacer los mismo porque cree que va a ser un gran negocio.

Marta tiene dudas y se lo cuenta a Fina que se muestra muy interesada en ese proyecto. A la joven le encantaría tener una casita propia y empieza a pensar en invertir el dinero que le dejó su padre en eso.

Fina le pide a Marta que la lleve a ver sus terrenos y se van juntas en el coche. Al llegar, Fina saca la cámara de Isidro. Se ha llevado la cámara de fotos de su padre para hacer fotos a los terrenos, pero aprovecha el momento para hacerle fotos también a Marta.

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Mientras discuten quien irá a revelar las fotos, entre risas, descubren que en esos terrenos no hay nada. ¿Habrá sido doña Clara, víctima de una estafa?

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Marta tiene dudas y se lo cuenta a Fina que se muestra muy interesada en ese proyecto. A la joven le encantaría tener una casita propia y empieza a pensar en invertir el dinero que le dejó su padre en eso.

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Marta tiene dudas y se lo cuenta a Fina que se muestra muy interesada en ese proyecto. A la joven le encantaría tener una casita propia y empieza a pensar en invertir el dinero que le dejó su padre en eso.

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Doña Clara le ha contado a Marta y a Andrés que está pensando en invertir en un nuevo proyecto inmobiliario y que ellos podrían hacer los mismo porque cree que va a ser un gran negocio.

Marta tiene dudas y se lo cuenta a Fina que se muestra muy interesada en ese proyecto. A la joven le encantaría tener una casita propia y empieza a pensar en invertir el dinero que le dejó su padre en eso.

Fina le pide a Marta que la lleve a ver sus terrenos y se van juntas en el coche. Al llegar, Fina saca la cámara de Isidro. Se ha llevado la cámara de fotos de su padre para hacer fotos a los terrenos, pero aprovecha el momento para hacerle fotos también a Marta.

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Marta tiene dudas y se lo cuenta a Fina que se muestra muy interesada en ese proyecto. A la joven le encantaría tener una casita propia y empieza a pensar en invertir el dinero que le dejó su padre en eso.

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Marta tiene dudas y se lo cuenta a Fina que se muestra muy interesada en ese proyecto. A la joven le encantaría tener una casita propia y empieza a pensar en invertir el dinero que le dejó su padre en eso.

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